Un Dia

Todo estaba bien hasta que un día conociste la vergüenza y la soledad.
Cuando en la tarde los amigos se guardaban en sus casas vos quedabas sintiéndote muy mal.

Nadie ve lo que ves.
Nadie entiende como fue. Nadie supo y nunca se sabrá.
“Yo no sé lo que quiero pero sí lo que no quiero” es una frase muy trascendental.
¿Dónde vas? ¿Dónde estás?
La marcha lleva otro camino.
Vos qué? ¿Te escapás?
La lluvia de plomo nos persigue todavía, vos no sos el único que está tan mal.
Por qué dijiste aquella tarde nos veremos otro día y te fuiste para nunca regresar?
Nadie ve lo que ves. Nadie entiende como fue.
Nadie supo y nunca se sabrá.
Y ahora todos me preguntan motivados por la duda: qué se hizo aquél tal por cual? Dónde…
Y ahora todo está muy mal porque un día decidiste probar cosas que te hacían olvidar. Con la cara descolorida y con ausencia de alegría preguntabas dónde te iban a encerrar. Nadie ve lo que ves. Nadie entiende como fue. Nadie supo y nunca se sabrá.
Si no te hubieran detenido, nunca hubieras sabido que en tu ausencia siempre la pasaste mal.