Sosisoyi

Vertebra de andén, piel de asfalto, vital transeúnte de ese microcosmos que somos, que trascendemos cuando la ciudad intenta dormir.

Sosy soyi, sosy soyi  
No poder decir, no poder hablar, no poder cantar, cantando.

Cuando todo en la pequeña ciudad parece dormir, 
Aparecen sensaciones rondando tu cuerpo
El calor se enreda en la piel 
Después de una caricia de mil manos que se erizan 
Centímetro a centímetro, el recorrido de los dedos, 
Mil bocas acariciadoras, lenguas consentidoras que atraviesan sin límite, 
Juego de vida, de vida…

Sosy soyi, sosy soyi
No poder cantar, no poder decir, no poder hablar, hablando.

El silencio como juego de palabras y miradas escondidas
Cuando la adversidad del mundo fastidia los abrazos
Loquitos enredados en ellos sin culpa, 
Por la adversidad del mundo ellos simulan separarse, 
Aprendiendo, gozando, escondidos la vida…

Sosy soyi, Sosy soyi 
No poder hablar, no poder cantar, no poder decir, sintiendo.

Cuando todo en la pequeña ciudad parece dormir 
El silencio como juego de palabras y miradas escondidas 
Que se enredan en la piel como un abrazo 
Y loquitos enredados en el sin culpa, 
En entrega juego de vida, aprendiendo, gozando, escondidos la vida…

Tengo ese miedo incomprensible 
De escuchar el agua que nos cae, que nos moja, 
Este silencio, tengo ese miedo de ser escombro de tu olvido.

Este desencuentro que me palpa la existencia, 
Que me habita y deshabita la memoria. 
Cuando esta ciudad intenta dormir me callo, 
Me convierto en piel de asfalto, en vértebra de andén. 
Ahí me callo, ahí me callo, ahí me callo.

Vertebra de andén piel de asfalto…