Regreso

Bienvenido a casa, hijo
Hijo, qué pálido estás
Tuvo sus fantasmas, madre
La noche que dejó atrás
Vení, sientate a mi lado
Que quiero contigo hablar
¡Ay, madre, si tus palabras
Pudieran darme la paz!
Debes olvidar la noche
Trata ya de descansar
Quítate el cinturón, hijo
Que te estorba ese puñal
Yo no estoy cansado, madre
Sólo no puedo olvidar
A tus libros vuelve, hijo
Con aquel antiguo afán
¿Qué libros me nombrás, madre?
Que no puedo recordar
Torna entonces a tus rosas
Ya no me atrae el rosal
Hijo, la vida es hermosa
Madre, no puedo olvidar
Quítate el cinturón, hijo
Que te estorba ese puñal