La Hora De Los Pueblos

Cuántos salieron del camino del hambre
Cuántos zampé sobre el poder del ensamble
Fuimos capaces de robarle una fase
Al tiempo de tormento lento desde la base
Y cuanto miedo que le tienen a aquello
Van aflojando la corbata del cuello

Que bello es ver a la plebe y yo sé yo
Que a ellos les irrita el destello
Popular que mete presión ante toda dictadura
O falsa democracia que nos ha dejado a oscuras
Los puntos de sutura, las marcas, torturas
Saturan, sentirán soltura y trituran
Tu juramento de locura y canta en vido
Los hechos en la mesa y no nos han vencido

La necedad ha sido escudo contra el olvido
El que puede con nosotros no ha nacido

Una vez más verás las calles
Llenas de almas libres que no tienen dueño
Una vez más verás las calles
Llenas de aquellos a quienes les propuso un sueño
La patria llamando está
Doce campanadas es la hora de los pueblos
La patria llamando está
Doce campanadas es hora de la lealtad
Hora de luchar, venga

Somos los hijos de San Martín y Bolívar
De Martí, de Azurduy y de Artigas
De Hidalgo, Sandino y la vida contra el arsenal foráneo
Y nuestra propia oligarquía
El miedo es mucho más grande que lo que vemos
Miedo de que sepamos lo que somos y lo que podemos
Dancemos y démos gracias
Nacimos en la tierra que hoy entierra su falacia
Las bombas ya cayeron en la plaza

La plaga ya pasó casa por casa
La razzia se llevó a la democracia
Ya le dimos la cara por demás a la desgracia
Los lápices escriben aún, pibe
Ni un ápice de sangre se perdió, pibe
Las Madres no dejaron de marchar, siguen
Nadie muere de sed a dos paladas del aljibe

Una vez más verás las calles
Llenas de almas libres que no tienen dueño
Una vez más verás las calles
Llenas de aquellos a quienes les propuso un sueño
La patria llamando está
Doce campanadas es la hora de los pueblos
La patria llamando está
Doce campanadas es hora de la lealtad
Hora de luchar, venga