Laniakea
Día Sexto
2:51Cuando ya no hay agua, está secándose Los ríos que venían bastante ya se están secándose Ya no hay comida Ya no hay producto, sólamente chiquititos Frutas en plástico, mierda que mastico, coches fantásticos Somos parásitos, hábitos drásticos, finales trágicos Pez acrobático, evita su castigo, esquivando látigos Quebrando latidos, ruido del tráfico, no alcanza mi ático Recetas de curas para su locura, drogas de espacio sináptico Trabajos estáticos, cuerpos erráticos, rutinas de pánico Esclavos sintácticos, venenos prácticos, terroclimático Poderes fácticos, seres fanáticos, el cielo impávido Respira muerte en su cálido, fin de su pálido azul aromático Tormentas de ácido cáustico Desde la cima del Everest Hasta el mar en calma que baña tus pies No quedará un sitio al que volver Sólo cicatrices, fuego, polvo y sed Olvidamos cuidar a la tierra, escupiendo a la acera Ignorando que es ella la casa que empeña Beneficios duplican la mierda, la esfera incineran El río, recuerda, vuelve a su curso Finitos recursos, el fin a concurso Preciosos discursos se estrellan La lluvia borrando las huellas del mundo Arco iris de magma en el cielo La furia del fuego y el hielo Bocados de mar al terreno Fauces de agua devoran los sueños eternos Ciudades ardiendo, rayos de rabia, tormentas de acero Humanos rezándole a un dios prisionero Y el único Dios que existía era su propio suelo Desde la cima del Everest Hasta el mar en calma que baña tus pies No quedará un sitio al que volver Sólo cicatrices, fuego, polvo y sed Desde la cima del Everest... Arco iris de magma en el cielo La furia del fuego y el hielo Bocados de mar al terreno Fauces de agua devoran los sueños eternos Ciudades ardiendo, rayos de rabia, tormentas de acero Humanos rezándole a un dios prisionero Y el único Dios que existía era su propio suelo "Si el clima fuera un banco, ya lo habrían salvado" Desde la cima del Everest Hasta el mar en calma que baña tus pies No quedará un sitio al que volver Sólo cicatrices, fuego, polvo y sed Desde la cima del Everest Hasta el mar en calma que baña tus pies No quedará un sitio al que volver Sólo cicatrices, fuego, polvo y sed Desde la cima del Everest Hasta el mar en calma que baña tus pies No quedará un sitio al que volver Sólo cicatrices, fuego, polvo y sed