Ahora Si Tengo Caballo
Domingo Garcia
5:57Yo soy Domingo García, primo de Manuel Socorro Yo perdo de si me matan y huyo si me echa el zorro Aprovecho de contarles un verdadero episodio El tigre de los Majomos yo fui quien lo mate solo Para entonces yo tenía un perro llamado Aromo Era un poco sardo negro con una mancha en el lomo Lo traje de Cabuyare, por las recomendaciones Lo cierto es que yo lo crié en muy buenas condiciones El perro era grande y bravo y le temían los ladrones Para llegarle de noche tenían que abrir operaciones Era bueno en realidad y sin exageraciones Mataba un babo en lo seco y mató cuatro leones Les agarraba el pescuezo y los mataba en trujones Me atrevo a decir que fue el campeón de los campeones Una vez tenía Figueira ocho toros cimarrones Que no podían amarrar los llaneros de esas regiones De esas regiones Ni a caballo ni embarcado en tiempo de inundaciones Los hombres más competentes colgaron los pantalones Los pantalones No los siguieron buscando, ellos sabían las razones Pues los toros eran bravos, grandes y guachamarones Guachamarones Un día salí con el perro y me llevé un cabue' soga Por allá en un mogotón se forma una batajola Una batajola Oí que bramó una res y se espantó un corocoro Era que el perro tenía nariciao a uno 'e los toros A uno 'e los toros Lo agarró por la nariz y lo tenía en los temblores Lo amarré de lo más firme y lo pegué de un orore Si de un orore Ahí fui y le avisé a Figueira y me hizo los honores Que si amarraba a los otros, me daba los dos mejores Los dos mejores Yo le dije "Eso es conmigo, búsquese los compradores" Para mí aquello era fácil sin tener muchos sudores Sin tener muchos sudores Así le amarré a los otros, toditos del mismo modo Y Figueira me cumplió, porque me dio los dos toros A los tiempos salí yo a cortar unos horcones Agarré el hacha y me fui, esas eran mis intenciones El perro no se quedaba rezaga'o en los rincones Aquello era su deporte, salir a esas excursiones En el monte encontró al tigre famoso de esas regiones Escucha cuando latió y también tres rugidones Salí corriendo hacia allá donde habían tres almendrones Cuando el perro me miró, estrechó malas acciones Le vi los ojos al tigre, que parecían dos tizones Enseguida se me vino sin más averiguaciones Yo lo que tenía era el hacha y aquel tigre tan enorme Enseguida recordé que Dios dijo "Dios y hombre" Basado en esas palabras, no le mostré los talones Por algo nací varón y me pongo pantalones En el momento pensé "O me embroma o yo lo embromo" Se me vino agazapado, venía retorciendo el lomo ¡Huy, Aromo, que es el tigre! ¡Apúrate Carrotapia, chico, que te come el bicho! Así se me fue acercando, caminando en varias formas Con una mano en el aire como pidiendo limosna Se estiraba, se encogía, hizo varias ceremonias Y como yo soy tan guapo, me daba risa la broma Se me vino despelucao, hizo varias ceremonias Haciéndole una muñeca como quien toca bandola Vino y me llegó cerquita, bailoteando un paso doble Y yo parado a pie firme como un botanón de roble Por fin me llegó a los pies y me lambió los de'os gordos Ahí se volvió a retirar, me dio una vuelta en contorno Lo que estaba era probándome, pero era una prueba a fondo A ver si yo abandonaba o a lo macho respondo Yo no lo quería matar para aumentar protocolo Si le daba un solo hachazo, fácil lo parto en dos rolos Vino y me olió el ombligo, la barriga y el estómago Pero haciéndole a las uñas como el que está tocando órgano Tocando órgano Aquello me hacía cosquilla, yo me estaba riendo solo Y en prueba de machía, llegué y le escupí en los ojos Le escupí en los ojos Yo estaba muy sonreído, a pesar del saperongo El tigre reconoció que yo no era ningún chongo Sí, ningún chongo Barrió el suelo con el rabo como si fuera una escoba Y lo noté que pensó "Este es el pupilo 'e Córdoba" De Ruperto Córdoba Por muy bravo que esté un tigre, este siempre reflexiona Sabía que yo lo esperaba para hacerle un hematoma Un hematoma De nuevo volvió a venir, se separó y echó un rezongo Estábamos frente a frente, cara a cara y hombro a hombro Ay, hombro a hombro Aquel bicho abrió la boca que parecía la de un horno Y rosnó con tanta furia que me dejó casi sordo Ay, casi sordo La tierra se estremeció, las hojas y los retoños Y por poquitos segundos estuve un poco bizongo Estuve un poco bizongo Aquel roñido tan cerquita en verdad me causó asombro Si lo hubiese repetido, a lo mejor abandono Yo me estaba impacientando, me dio un poco 'e reconcomio O me mata o yo remato a este tigre del demonio Entonces me le fui encima a jugar todo por todo Se miró tan acusado, me hacía culato en un obo Cuando se vio atropellado, me rezongó de otro modo Me hormiguearon los pies, las rodillas y los codos Nos fuimos al toma y deme, pa'lante que el tiempo es oro Era el momento crucial, que alguno se iba a echar yodo Yo tenía el hacha en dos manos y le sacudí ese morro Le desfiguré la cara, botaba la sangre a chorro Apenas cayó aturdido, cuando lo remató Aromo Lo agarró por el gañote y el diablo le cantó un tono