Conchita

Qué lindos ojitos te ha dado el Eterno
Qué linda boquita y qué pulidos pies
Qué preciosos rizos forman tus cabellos
Sin duda Dios te hizo con luz de los cielos
Preciosa Conchita, flor de Nazaret

Para que te cante, mi rico tesoro
Pobre es mi dialecto, pobre es mi pensar
Necesitaría de una mira de oro
Y de mil querubes en lejos sonoros
Y con el formar de un coro celestial

Si yo fuera rico te haría un estatuario
Grabaría tu imagen en blanco marfil
Para colocarte como un relicario
Porque así se guarda un bello serafín

Cuando tu boquita me das, ángel mío
Siento entre mi pecho un inmenso placer
Siento que al cruzarse tu aliento hacia el mío
Un amor ingente que borra el hastío
Y que me transporta a orillas de un Edén

Yo ya bien comprendo que todo he perdido
Pobrecito consuelo, perdí ya mi fe
No sé lo que tengo en mi pecho escondido
El único empeño de vivir contigo
Y ni de rodillas lo conseguiré

Juzgo que me has dado tu inmenso cariño
Y te preocuparas por mi amor clemente
Y de mil harapos cubierta tu frente
Cubierta de harapos me habrías de seguir

Al mundo atravieso, cuando un pobre bardo
Buscando en mis horas deseó y no sé qué
El cielo me hizo un poco afortunado
Si corona y cestros Dios me hubiera dado
Yo corona y cestros pondría a vuestros pies

Luz de mis ensueños, flor que el viento mece
Sol de Palestina que alumbrando vas
Y a tu amado dueño y aunque no merece
Y si por desgracia llegara a perderse
No culpes, hermosa, quien sufriendo está