Don Evaristo

Don Evaristo me cuenta que desde el Tacho
Él puede ver como dar al mundo una solución
Lleva escondido a un facho liberalista
Bien disfrazado en un tono irónico y fanfarrón

Don Evaristo sostiene su ciencia a fuego
Se vuelve ciego, no admite contradicción
Repite sin juicio alguno lo que le instalan
Defiende con uña y diente su convicción

Yo me pregunto quién piensa por Evaristo
Porque él no piensa más
Quién le escribirá el libreto
Que él ventila por toda la ciudad

Don Evaristo me cuenta que los coreanos
Que bolivianos y paraguayos se tienen que ir
Que le sacan el dinero a los argentinos
Él siente que no hay lugar en nuestro país

Me habló de un tiempo de lujos y vacas gordas
Del menemismo donde se cambió el colchón
Yo le enumero las consecuencias de aquel siniestro
Pero él me cambia de tono y conversación

Yo me pregunto quién piensa por Evaristo
Porque él no piensa más
Quién le escribirá el libreto
Que él ventila por toda la ciudad

Don Evaristo se cansó de repetirme
Con los milicos acá se vivió mejor
Dice que a algunos le harían bien unos cuantos tiros
Y él siente nostalgia a veces de ese rigor

Fiel exponente de una nefasta postura
Vocero adepto a la globalización
Señor pensado pero con un dejo de ternura
Que en su bravura destila sones de gorilón

Yo me pregunto quién piensa por Evaristo
Porque él no piensa más
Quién le escribirá el libreto
Que él ventila por toda la ciudad