Petra Narcisa

Sí es de febrero recuerdo la tarde fresca y plomiza
La tarde fresca y plomiza
En lomos de lagunazo venía silbando sin prisa
Quebrando con los estribos los cogollos de artamisa
Como a las seis más o menos llegué a la caballeriza
Llegué a la caballeriza
Había un baile muy nombrao en el ato la cocuiza
Desde un rincón de la sala venía un joropo en la brisa
Me bajé del lagunazo y me canché las cotizas
Y en una sola mirada pasé una leve requisa
Pasé una leve requisa
La tinaja en un rincón, la lámpara en la repisa
Un candelorio en el patio y un muchacho que lo atiza
Olor a carne de soroche, atraquío de leña en chamiza
La llama baila contenta y al cielo va la jumisa
Y al cielo va la jumisa
Estaba yo enamorao, loco de Petra Narcisa
La flor de ese vecindario, y era la hija de la guisa
Trigueña de ojos rayaos, cabellera negra y lisa
Un rostro de bellas líneas que me ve y se ruboriza
Con un clavel en los labios y un lirio blanco en la risa
Tímida, joven y hermosa pero muy escurridiza
De aquellas que se te pelan por la manga e' la camisa

Al punto de medianoche cuando el baile se encarniza
Cuando el baile se encarniza
Los pies me bailaban solos, mi mente sola improvisa
Me salió el amor del alma con una copla precisa
Y de no haber sido así mi pecho se carboniza
Mi pecho se carboniza
Le dije: "Petra, por ti mi corazón agoniza
El encanto que usted tiene me estremece y me hipnotiza
Me sacude contra el suelo, me arrastra y me inutiliza"
Cuando ando por la sabana mi memoria la divisa
Mi memoria la divisa
Que va danzando en las nubes con una tenue sonrisa
Que me hace temblar el alma y al ser se me paraliza
Deseando beber su aliento que me alza y me vigoriza
Y usted sabe que el amor llega callao y no avisa
Llega callao y no avisa
Hasta al mismo San Antonio le pedí antier en la misa
Que usted sea mi compañera con devoción enfermiza
Cuando se terminó el son se me acercó la mestiza
Con una totuma llena de carne asada y choriza
De carne asada y choriza
Y al percibir su resuello sentí como una cueriza
Que nada más de contarlo todavía me martiriza
Me dijo: "Ponte de acuerdo con la negra María Luisa"
Hablé con la negra al rato, dejamos la idea concisa
Con los lebrunos del día bajo una aurora cobriza
La monté en mi lagunazo, me perdí en una polviza
Y así me la llevé, juí del miércoles de ceniza