Desgarro

Desgarro.


Cielo oscuro oscuro
crece el silencio
sube la quietud.
Romance de pensamientos.

Se va el orgullo.
Murmura el rocío.
La brisa se ausenta
hasta el horizonte.

chí no queda nada
sólo la noche
y su techo oscuro oscuro
sin voz ni luna
sin lugar ni entierro
sin temperamento
ni palabra cautiva.

Con rostro sin carne
desgarro mis telas
en carrozas de heridas negras
gritan mis ojos marchitos
como relámpago desbocado
o torrente enrojecido
cual animal retorcido
por el cuchillo del silencio.

Gritan
gritan los susurros
hasta hacerse huracán.
En un segundo
baboseando libertad viva.

¡cy!
desesperada huída
ante el bravo verdugo
que escupe su furia ciega.

¡Grita por fin!
un tiempo infinito
del yaciente entierro
gotas moribundas
que se secaron tras las lágrimas.

Gritan la ausencia
de mis lágrimas agotadas
hace un millón de años amargos.

Que asesinaron.

Que asesinaron.

Con rostro sin carne
desgarro mis telas en voz
en carrozas de heridas negras
gritan mis zorros
sin temperamento
ni palabra cautiva.

Cual animal, retorcidas mejillas
hacia una amortajante frustración
de capullos que no nacieron
y de encuentros que asesinaron.

Que asesinaron.

Gritan mis manos y mi ceño endurecido
ya borrados por el encierro
enmascarados por el silencio.

¡¡¡Gritan!!!
¡¡¡Te amo!!!

¡¡¡Te amo!!!