El Seminarista De Los Ojos Negros
Omar Cerasuolo
5:38Hay una mujer que tiene algo de Dios Por la inmensidad de su amor Y mucho de ángel por la incansable Solicitud de sus cuidados Una mujer que, siendo joven Tiene la reflexión de una anciana Y en la vejez trabaja Con el vigor de la juventud Una mujer que, si es ignorante Descubre todos los secretos de la vida Con más acierto que un sabio Y si es instruida Se acomoda a la simplicidad de los niños Una mujer que, siendo pobre Se satisface con la felicidad de los que ama Y, siendo rica, daría con gusto su tesoro Por no sufrir en su corazón la herida de la ingratitud Una mujer que, siendo vigorosa Se estremece con el gemido de un niño Y, siendo débil, se reviste a veces Con la bravura del león Una mujer que mientras vive No la sabemos estimar Porque a su lado todos los dolores se olvidan Pero, después de muerta Daríamos todo lo que somos y todo lo que tenemos Por mirarla de nuevo un solo instante Por recibir de ella un solo abrazo Por escuchar un solo acento de sus labios De esa mujer no me exijan el nombre Si no quieren que empape con lágrimas Vuestro álbum Porque yo la vi pasar en mi camino Cuando crezcan vuestros hijos Leedles esta página Y ellos, cubriendo de besos vuestra frente Os dirán que un humilde viajero En pago del suntuoso hospedaje recibido Ha dejado aquí, para vosotros y para ellos Un boceto del retrato de su madre