Paulo

6 A.m. en el reloj
Otro día más con insomnio
Seis días sin dormir, puedo sentir dentro de mí un demonio
Son seis cafés, bastantes cargados
Igual de cargado es el arma que me guarda a un costado
Recostado sobre esa cama cálida que en algún día
Se compartía amor y calor en noches frías
Cuelga una foto en su pared y ensaya puntería
Mira al cielo y dice: "Perdóname madre mía
Yo pensé que en el cielo te encontraría
Pero por lo que haré en el infierno me esperarían"
Amanece, planea su venganza a sangre fría
Acariciando su revólver mientras sonreía
Tocan su hombro, su sombra cobró vida
Y dijo: "No estás solo, hay que quitarle la vida
Porque si ella pecó igual que tú
En el infierno le doy la bienvenida"

Hola, ¿cómo estás?, ¿cómo te encuentras?
¿Bien?, qué bien, me alegro
Vine solo para saludarte y preguntarte
¿Por qué demonios dices que soy un cobarde?
Nunca había mirado a Paulo enojado de esa manera
Y a la vez sonriendo
Sentí un escalofrío aterrador recorriéndome todo el cuerpo
Al ver como del lado izquierdo se sacaba un fierro
Y con él un grito escalofriante que decía
"¡Ahora mismo te vas al infierno!
¿Crees que te voy a perdonar solo porque eres mujer?
Tengo un arma en mi cintura
Di tus últimas palabras que me vas a conocer
Ahora mismo te vas al infierno a saludar a Lucifer"
Se escucharon tres disparos retumbando hacia lo lejos en la cuadra
Aún recuerdo que los perros ladran
Fue tan fuerte el ruido que los autos encendieron las alarmas
Me bajé del coche para ver lo sucedido
Pero ya era tarde, había un cuerpo
Sin vida tendido en el piso
Me quedé en shock y no pude reaccionar
Escuché a lo lejos la voz de Paulo que decía
"Ahora tenemos que escapar
¡Ahora tenemos que escapar!"