Hay Un Ruiseñor

Hay un hombre tomando el sol de una casa de ancianos
El alma blanca, la boina negra
Bastón de caña entre las manos
Revolviendo la tierra mansa
Como si tuviera el mundo a sus pies
Mientras ve hacia atrás

Ha empezado por recordar que fue un niño sin temores
Sólo algunas noches, allá en el pueblo
Cosas de hombres
Que llegó a comprender mejor
Cuando tuvo que salir a trabajar y tuvo que sudar
Por su propio pan, tiempo de luchar

Pero hay un ruiseñor
Que no cesa de cantar
Hay un ruiseñor
Que cantaba ya
Cuando cayó por la libertad

Una enfermera del hospital fue su virginal esposa
Que dos hijos le regaló
Uno de azul y otro de rosa
Porque después de unas hambrunas
Se fugó con un sicario del patrón y tuvo que llorar
Y tragarse el mal, tiempo de olvidar

Pero hay un ruiseñor
Que no cesa de cantar
Hay un ruiseñor
Que cantaba ya
Cuando aprendió la soledad

Hay un ruiseñor
Que no cesa de cantar
Hay un ruiseñor
Que siempre cantará

La fortuna hizo las paces y hoy lo miman unos nietos
Que se pinchan las caras tiernas
Con la barba del abuelo
Cuando le vienen a visitar
Él les pone un cascabel en el mirar
Les habla del amor
De la guerra y de la paz
Y dice sin dudar

Hay un ruiseñor
Que no cesa de cantar
Hay un ruiseñor
Que siempre cantará

(Hay un ruiseñor
Que no cesa de cantar
Hay un ruiseñor
Que cantaba ya)
Cuando llegó el tiempo de reír
Y de recordar