Se Llamaba Capitán

Flaco, un día de tormenta,
sus patas hacia afuera parecía Chaplin...
Listo, cómo si conociera
tomó la delantera en el camino sin fin...

Noble, su miedo fue confianza,
mis caricias su esperanza de una vida mejor...
Juntos unimos el destino, el abrazaba mi locura,
Yo nombré su soledad...

Se llamaba Capitán...

Cruzaba la ciudad
siguiéndome...
buscándome...

Corría Capitán
embistiéndome
con la fuerza de un tren...

Se llamaba Capitán.

Vino con un golpe en la cabeza
los ojos llenos de tristeza, no quería comer...
En mis brazos lo llevé hasta el matasanos
me miró con desamparo: ya no hay nada que hacer...

Puse mis manos en su herida,
le pedí al Dios de arriba que me lleve con él...
El lamiéndome las manos, apoyó su cabezita en mi regazo, y se fue...

Se llamaba Capitán...