Sandra María

Te conocí en una fiesta de parranda y alegría
Desde que te conocí mejoró la suerte mía
Quedé flechado por cupido en aquella amanecía
Desde entonces para acá se acabó mi soltería
Pero no falta Satán en la muerte del Mesías
Egoístas envidiosos contigo me malponían
Te decían que era un mal hombre, que yo no te merecía
Que donde quiera que iba dos y tres hembras tenía
Pero más pudo mi amor que lo que ellos pretendían
Te lo entregué puro, limpio, libre, sin hipocresía
Amor con amor se paga y al mío le correspondías
Por eso es que eres mi amor, mi bella Sandra María
Al cabo de un año y pico nuestro amor más crecería
Porque es que a dos gemelitas le dábamos bienvenida
En honor a tu mamá, las dos se llaman María
Una Laura, otra Gabriela, mis morochas consentidas
Dos motores en mi vida a una de los que tenía
Porque es que mis hijos son mi musa y mi poesía
La fuerza para cantar por toda la geografía
Esa es la mejor manera de ganarme la comida
Respecto a mi relación, lo digo con gallardía
Aún siguen los envidiosos chismeándolo todavía
Pero le pediré algo, mi bella Sandra María
No deje que un chisme acabe la vida suya y la mía